intenc(s)iones

No buscaba un amorío, tampoco una satisfacción lasciva.
Buscaba… quién sabe que buscaba.
Diría mejor que esperaba;
                           (¿Qué?)
Un descubrimiento. Un contacto.
La pasión de sentir el intercambio. 
                     De imbuir con calma.
Los trazos mostraron una(s) trayectoria(s). 
Indeterminada, llena de incertidumbres.

Pudo ser el temor, más que el miedo de cohibir las transiciones.
O pudo ser su misma naturaleza inequívoca 
             que esbozaron sus propios caminos.
Ellos mismo dieron lucidez a su vocacion, plasmando su música.

El espacio se volvió a cartografiar de un modo, tal vez, intransigente. 
Transgresor de su alrededor. Principalmente, fracturador de idiosincrasias: la intención. 

El escenario se disipó como una desconexión mental. 
Momento de sobredosis. Enclaves gráficos de pasos. 
De posibles conexiones. 
       Intensión de cópula.

Complexidad

El caos es el resultado de la unión de la complejidad y la simplicidad, es “momento” en donde lo simple muta, deviniendo complejidad; y en donde eso complejo muestra sus “puntos críticos”, donde se simplifica. Este es el momento en el cual el orden y el desorden coexisten, cohabitan engendrando las estructuras fractales; unívocas a una evidente no-linealidad.

“La no-linealidad viene de la concepción que hoy se tiene del tiempo; mientras creamos que el tiempo es una línea recta arrojada desde el pasado hacia el futuro, es difícil recontar muchas de nuestras experiencias temporales interiores, que normalmente menospreciamos como ilusiones, disociaciones, rarezas de la memoria y la percepción, en cualquier caso nada tiene que ver con la naturaleza física y esencial del tiempo”¹.

Las imagenes que se muestran son de un estudio de diseño industrial radicado en Londres. Se llaman Platform. Este proyecto lo denominan Fractal Table.
(me parecio muy pertinente que acompañara el texto de arriba).

¹